COMO HUMANOS, CONSIDERANDO,

TODAS LAS "CONSIDERACIONES":

* Que todos los ciudadanos en el Ecuador o en cualquier país del mundo, hemos nacido vivos y habitamos por milenios, los territorios de esta geografía terrestre, que  por ley y derecho natural, se nos ha adjudicado en este plano de la realidad, y que nos ha garantizado sine qua non, la posesión soberana en espacio - tiempo, de este fractal universal.

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Así, decretamos y recordamos a quien quiera saberlo, que somos seres vivos originales de la raza humana, quienes, por casi 200 millones de años, hemos habitado este planeta que tiene una edad aproximada de 4.600 millones de años, y por tanto, nos adjudican las leyes naturales superlativas, a las leyes del hombre,  en todo aquello que nos determina el alcance de la subsistencia y el bienestar, en plena armonía con los demás habitantes de este mundo, llamado Planeta Tierra.

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Hoy, celebramos un nuevo despertar de conciencia planetaria,  para para augurar que la humanidad es más que sumatorias genéticas o intenciones cuánticas.

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Somos fractales de un universo que ha vibrado desde siempre, en las frecuencias de la perfección, de las totalidades en equilibrios frágiles y delicados ecosistemas.

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La acción antropogénica, ha sido la clave del esclavismo y la dominación, que ahora ha quedado expuesta, en este tramo de la historia postmoderna, del segundo milenio de nuestros tiempos. Donde unos pocos, dominan a las mayorías, sin que esas huestes terrestres, lo hayan sospechado.

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Pues sus ojos fueron oscurecidos por la penumbra de las cuevas de Platón, a las que nos confinaron mentalmente, desde hace centenios. 

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Pero ahora, gracias a un error en su mátrix, La humanidad ha despertado y al unísono, con un fuerte rugir del alma libre,  desde todas las latitudes de nuestro mundo, que ahora se decreta liberada, en presente y futuro, cual original humanidad viviente, recuperamos la soberanía del ser, tanto como el espacio temporal, que por derecho y leyes de la naturaleza, aplicadas a todo lo visible en nuestro horizonte, nos perteneció y pertenece.

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Toda la camada oscura, sectaria y cruel,  que ha dominado al ser humano vivo, hoy está expuesta a sol incólume de la verdad, queda disuelta y anulada, en sus pretensiones de nuevo dominio en un nuevo orden mundial no consentido.

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Toda la agenda impresa en las pantallas digitales, queda entonces anulada y desautorizada, por el despertar de esta generación, por hoy y siempre. Como humanidad así lo decretamos en sendos postulados de libertad, a lo largo y ancho de todas las latitudes, de nuestra casa grande, la Tierra.

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Por estas razones, como ecuatorianos, consignamos nuestra rúbrica esencial y natural en puño y letra, con la frecuencia sanguínea, de que somos libres y seremos siempre libres, como los átomos del universo para procrear más universos y más amor al prójimo, sin dominio ni esclavitud.

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Que las demás entidades del universo lo sepan, y que los opresores de la oscuridad  queden advertidos, que su empresa ha terminado. En honor y espíritu. 
Somos la humanidad vital, en el Ecuator terrestre.